Con estas dos muertes, Aragón contabiliza en lo que llevamos de año un total de 13 accidentes laborales mortales, cifras alarmantes a las que debemos poner freno a la mayor brevedad posible.
Para OSTA, es indudable que, la escasa formación de los y las trabajadoras, la nula inversión en seguridad y salud laboral de las empresas, junto con la externalización de trabajos y la subcontratación son causas que generan y aumentan la tasa de mortalidad en el trabajo.
Es necesario un plan de actuación conjunto para que, tal y como se establece en la normativa de prevención, se cumplan las medidas de seguridad y así poder evitar más fallecimientos en el puestos de trabajo. Debemos ser conscientes que la prevención es una inversión necesaria y útil para todos y todas en el mundo laboral.
Por último, seguimos solicitando al Gobierno de Aragón la participación de todas las organizaciones sindicales para poder poner freno a los accidentes laborales en Aragón, puesto que, con el actual modelo de diálogo social, la siniestrabilidad sigue en aumento.
Nadie debe morir en su puesto de trabajo.