Os informamos, que el pasado lunes 16 de octubre se constituyó la mesa negociadora del XIV Convenio Colectivo, en la cual OSTA tiene un representante.
En la reunión, la empresa manifestó su intención inicial de llegar a un acuerdo en un breve plazo de tiempo. Desde OSTA sabemos que las prisas no son buenas consejeras, y mucho menos en un escenario como el que nos encontramos.
Este convenio colectivo, marcará y regirá las condiciones de los trabajadores/as durante un periodo de años de importante transición. Por eso, es fundamental por toda la parte social, tener los planteamientos y las ideas muy claras.
Aunque mal se ha empezado cuando ni siquiera la parte social, han mantenido ningún tipo de reunión, para consensuar una plataforma unitaria que defender.
Desde el famoso “Plan de los 100 días”, del que nadie conoce exactamente en que consiste pero todos imaginamos por donde puede ir, pasando por la autonomía real de esta planta a la hora de negociar, y sobre todo, el desconocimiento de los planes de PSA para las diferentes plantas del grupo, hacen que esta negociación se convierta una vez más en atípica, y sujeta a los plazos predeterminados por la compañía.
Cuando se habla de “reestructurar Opel”, debemos recordar que los trabajadores/as de esta planta, llevan múltiples planes de ajuste, que no han hecho más que degradar sus condiciones laborales y salariales, a la vez que han regulado el proceso productivo totalmente a la carta, aumentando cada vez más una “flexibilidad laboral” que choca frontalmente con el derecho que todos y todas los trabajadores tienen a la conciliación familiar.
Entendemos que el nuevo propietario PSA, pretenda alcanzar la rentabilidad cuanto antes, pero no a expensas del empeoramiento de las condiciones de trabajo y sobre todo, del mercadeo de modelos entre las diferentes plantas.
OSTA tiene claro que tras estos años pasados de crisis y recortes, este convenio es la oportunidad de negociar unas mejores condiciones laborales y sobre todo, de ir recuperando las anteriormente pérdidas, de otro modo cada nuevo modelo significará irremediablemente otra “vuelta de tuerca”… ahora con PSA.